La vitamina B9, también conocida como folato, es un nutriente esencial para la formación de nuevas células en el cuerpo y también para corregir errores de ADN.
Además, juega un papel clave en el desarrollo del sistema nervioso de los bebés y actúa en la prevención de enfermedades del corazón y de varios tipos de tumores, incluyendo el cáncer de próstata, de mama y colorrectal.
La vitamina B9 se puede obtener a través de los alimentos, ya que se encuentra de forma natural en los alimentos. Sin embargo, este nutriente se puede producir industrialmente. Esta forma sintética de folato se conoce como ácido fólico y está presente en muchos alimentos enriquecidos artificialmente.
¿Dónde podemos encontrar la vitamina B9?
Las principales fuentes alimenticias de folato son:
- verduras de hojas verdes como la espinaca, la col rizada y el brócoli;
- frutas, como mango, plátano, aguacate, naranja, limón, tomate y melón;
- cereales integrales;
- pan de trigo;
- champiñones;
- legumbres, como frijoles, lentejas, soja y cacahuetes;
- hígado;
- huevos de gallina.
Como el ácido fólico se produce industrialmente, se puede encontrar en medicamentos, suplementos y también en alimentos fortificados.
¿Cuáles son las principales causas de la deficiencia de folato?
La deficiencia de folato puede ser causada por varios factores, incluida la baja ingesta de alimentos que contienen este nutriente. Las personas con enfermedad celíaca y aquellas que consumen alcohol en exceso también pueden tener problemas para procesar y absorber la vitamina B9 y, en consecuencia, una deficiencia de este nutriente.
Las personas que requieren diálisis, las mujeres embarazadas y las que amamantan también pueden desarrollar esta deficiencia porque necesitan mayores cantidades de folato en sus cuerpos.
Además, algunos medicamentos utilizados para tratar ciertos tipos de cáncer, diabetes, presión arterial alta y anticonvulsivos también se han asociado con una menor absorción y procesamiento de la vitamina B9 en el cuerpo.
La relación entre el folato y el embarazo
La alimentación de la mujer durante el embarazo es fundamental para el desarrollo del bebé. Por ello, la suplementación con ácido fólico y la ingesta de alimentos ricos en vitamina B9 están indicadas y son de suma importancia, especialmente durante las primeras etapas del embarazo.
La deficiencia de folato está relacionada con varias complicaciones gestacionales, como el desplazamiento de la placenta, el aborto espontáneo y la preeclampsia. Esta carencia también está asociada a malformaciones en los recién nacidos, como bajo peso al nacer y problemas en la cara y la boca, como labio y paladar hendido.
Las investigaciones demuestran que la ingesta correcta de este nutriente puede reducir hasta en un 70% la probabilidad de que el embrión desarrolle defectos en el tubo neural, la estructura que origina el cerebro y la médula espinal.
¿Cuáles son las consecuencias de la falta de folato en el cuerpo?
La deficiencia de folato puede causar anemia megaloblástica, una afección en la que las células sanguíneas son más grandes de lo normal, lo que compromete sus funciones.
Además, los niveles bajos de esta vitamina se han asociado con retraso en el desarrollo neurológico y de locomoción, cambios en el comportamiento, convulsiones, depresión, pérdida de peso, cáncer, enfermedades cardíacas y un mayor riesgo de tener un bebé con deformidades en la médula espinal o el cerebro.
Principales síntomas de la deficiencia de folato en el cuerpo
La falta de vitamina B9 en el cuerpo puede causar los siguientes síntomas:
- signos generales de anemia;
- palidez;
- falta de aire;
- mareo;
- enrojecimiento y dolor de la lengua;
- Diarrea;
- reducción del sabor;
- perdida de peso;
- irritabilidad;
- depresión.
¿Cómo diagnosticar la deficiencia de folato?
Además de identificar los signos y síntomas, la deficiencia de folato en el cuerpo se puede diagnosticar realizando análisis de sangre. Un hemograma completo también puede detectar anemia megaloblástica.
Prevención y tratamiento de la deficiencia de folato
Un médico o nutricionista puede planificar una dieta equilibrada para el paciente, consumiendo cantidades óptimas de alimentos ricos en vitamina B9. Sin embargo, las dosis diarias de suplemento de ácido fólico también están indicadas y ayudan eficazmente en la prevención y tratamiento de esta deficiencia.
Factores genéticos implicados
Las variaciones genéticas en el gen llamado MTHFR, ubicado en el cromosoma 1, pueden estar asociadas con la predisposición de un individuo a tener niveles reducidos de folato. Este gen es el encargado de producir la enzima involucrada en el procesamiento y absorción de este nutriente en el organismo. Los cambios en su función influyen en los niveles sanguíneos de folato.
Es posible descubrir los impactos de nuestra genética en la salud de nuestro organismo a partir del Test de Ancestralidad, Salud y Bienestar de Genera. Con tan solo una muestra de saliva -que se puede recoger en casa- se puede conocer la predisposición a niveles reducidos de folato (vitamina B9) y otras vitaminas y nutrientes, predisposiciones a enfermedades genéticas, además de las dietas y ejercicios físicos más adecuados para tu cuerpo, cómo cuidar tu piel y cabello, y mucho más.
Referencias
Síntesis de algunos nuevos heterociclos a base de ácido fólico de actividad biológica prevista.
Agência Nacional de Vigilância Sanitária – Anvisa. Programa de Monitoramento da Fortificação das Farinhas de Trigo e Milho com Ferro e Ácido Fólico.
MANUAL MSD – Versión para profesionales de la salud. Deficiencia de folato.